Como todos nacemos,
Desnudo y llorando, Y que alguien
Desconocido para ti
Te toma en sus brazos.
Pero al crecer te das cuenta
Que te sueltan de la mano.
Porque a veces tienes hambre
Y te ahoga la sed…
Por las caricias
Que no te han dado.
Con una sonrisa leve
La inocencia no entiende
Porque un grito delirante
Se apodera de tu mente.
Entonces mis ojos
Brillan impotentes
Y solloza el corazón
Porque no es indiferente.
Y me hago preguntas
Del por qué la vida es tan cruel
Con quien no se lo merece.
Niño de la luna que ilumina
Tus frías noches,
Y cuando sale el sol
Posa en tus mejillas
Un beso ardiente.
Hoy te dedico las palabras
Que de mi alma florecen,
A ti, niño de nadie,
Pero a la vez…De tanta gente.
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